La profesión donde casi no existe el paro en Euskadi
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El Correo, 15 de Septiembre de 2021
ECONOMÍA
Jorge Murcia

El 95% de los graduados en matemáticas de la promoción de 2016 de la UPV/EHU tenía trabajo tres años después

La tasa de paro juvenil vasca es del 17,8%, según la última Encuesta de Población Activa (EPA). Sin embargo, muchas empresas del territorio dicen tener dificultades para encontrar ciertos perfiles laborales. Los más solicitados, según la patronal Confebask, son los incluidos en la rama STEM, acrónimo de las palabras en inglés Sciencie, Technology, Engineering and Maths (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas). Todas son áreas con una gran tasa de empleabilidad, pero tal vez sean los estudiantes de matemáticas quienes tengan ante sí un mayor abanico de salidas laborales.

El 95% de los graduados del grado de Matemáticas que imparte la Universidad Pública Vasca -único centro donde se puede cursar de manera presencial en Euskadi- en el curso 2015-2016 estaba trabajando tres años después. Son datos de un estudio de incorporación a la vida laboral realizada por Lanbide en el cuarto trimestre de 2019. Es decir, la tasa de paro de este colectivo era sólo del 5%. Además, el 37% de estos alumnos tardó menos de un año en encontrar su primer empleo.

Más de la cuarta parte (el 27%) trabajaban en empresas del sector de la investigación y desarrollo, mientras que el 34% había encontrado empleo en el sector educativo. Por su parte, el 16% desempeñaba un trabajo relacionado con la programación, consultoría y otras actividades relacionas con la informática.

No obstante, en los últimos años se observa una clara reducción del peso de la docencia en favor de otros campos. «De hecho, ha aumentado considerablemente la presencia de matemáticos en sectores como la banca, la consultoría o la informática», dice Mariasun García, vicedecana de calidad e innovación de la facultad de ciencia y tecnología de la UPV/EHU y profesora de matemáticas. Así que muchas plazas de profesor convocadas por las comunidades autónomas quedan vacantes. «Y las empresas necesitan más matemáticos de los que salen de las facultades», añade García.

Hay más datos que corroboran la buena salud laboral de esta disciplina. Una encuesta de la UPV/EHU a graduados en matemáticas de la Facultad de Ciencia y Tecnología, desde el curso 2007/08 al 2017/18, revelaba que el 93% de los que respondieron al cuestionario estaba trabajando a finales de 2018. Lo hacían en sectores como la consultoría, la enseñanza preuniversitaria (el 16,84% en ambos casos), en centros de investigación (el 12,24%) o en las finanzas y bancos (el 11,2%). Más de la mitad de estos graduados (el 56,78%) tenía un contrato fijo o indefinido en el momento de realizarse la encuesta.

Estos datos se enviaron a la Comisión Profesional de la Real Sociedad Matemática Española (RSME), que en colaboración con la Conferencia de Decanos de Matemáticas (CDM) realizó un estudio sobre la empleabilidad de los titulados de matemáticas desde 2007/2008 hasta 2017/2018 en España. Una de las principales conclusiones es que la tasa de paro de este colectivo estaba en torno al 7,5%. Además, el índice de desempleo a los dos años de finalizar los estudios era sólo del 4,6%, y al cabo de 5 años la ocupación era casi plena: el 96,7%.

Presencia en un muchos sectores

En la actualidad es difícil encontrar un sector económico que no requiera matemáticos. Disciplinas que usan los procedimientos, algoritmos, herramientas y esquemas de razonamiento de las matemáticas. El Internet de las Cosas y el Big Data han disparado la demanda de profesionales capaces de sacar todo el jugo a los grandes flujos de información que se generan en casi toda actividad económica moderna actual. Y los matemáticos son uno de ellos.

La investigación económica, tecnológica, demográfica, o incluso metereológica, se apoya muchas veces en la labor de estos trabajadores. Pero también son cada vez más solicitados en bancos, consultoras, empresas de investigación sanitaria, o marketing como analistas de datos, desarrolladores web, técnicos en seguridad informática o estadísticos.

Según explica Mariasun García, los matemáticos son profesionales que, independientemente de su gusto por la materia, «deben tener una cierta capacidad de abstracción. Ser capaces de asimilar ideas nuevas y de ver conexiones entre ellas. Es como encajar las piezas de un puzzle». Los aspirantes a cursar un grado de matemáticas en Euskadi tiene, además, que superar una de las más altas notas de corte de la UPV/EHU: 12,252 puntos para el curso que empieza.

 
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