Ana Pont: En matemáticas, el nivel es cada vez más bajo
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El País, 13 de diciembre de 1999
Apuntes Universitarios, Única, pág. 1 - Careta
ENTREVISTAS
MARÍA FABRA Ana Pont: " En Matemáticas, el nivel es cada vez más bajo"

Directora de la Escuela de Informática de la Universidad Politécnica de Valencia desde 1998, afirma que "los profesores están asustados por el nivel matemático de los alumnos", que constituye uno de los fundamentos de la Informática. Considera que en España nos encontramos atrasados en materia de comunicaciones. "La famosa autopista de la información es para nosotros un camino de cabras", ironiza.

Como no sólo de conocimientos técnicos vive el hombre, desde la Escuela de Informática se promovió la candidatura de Enric Valor como doctor honoris causa. De hecho, este centro es el que más grupos en valenciano tiene de la Politécnica. Página 4

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Apuntes Universitarios, Única, pág. 2 - Opinión

Conspiración contra la aritmética

A estas alturas de 1999 parece asistirse a una conspiración no ya nacional, sino internacional, contra la aritmética más básica, la de los números naturales, de la que ni el mundo universitario se escapa. Cunden en este mundo occidental nuestro los preparativos de grandes boatos y algarabías para celebrar estas próximas Navidades el advenimiento del nuevo siglo y el nuevo milenio. La operación consiste en manipular la lógica y sana ilusión popular por inaugurar nada menos que una nueva etapa milenaria en la historia de la humanidad alterándola y anticipándola un año en provecho interesado. Adulterándola, en fin.

De vez en cuando se alzan voces sensatas (incluidas las del Rey aleccionando a altos magistrados al respecto durante un encuentro) intentando hacer recordar que ni el milenio ni el siglo acaban en 1999, sino en el 2000. Pero los conspiradores no sólo no escuchan estas voces sino que procuran ahogarlas en el ruido de sus preparativos de festejos, como las agencias de viajes, las discotecas y los hoteles que llevan meses seduciendo incautos para apuntarlos a una Nochevieja especialmente dispendiosa. Otros se suman a la corriente por oportunismo político y por sus reflejos condicionados de incorporarse a cualquier movida popular por si caen votos, como ese concejal que ha perpetrado la horterada de coronar el monte Benacantil con un reloj digital en neón contando los segundos que quedan para el 2000. No son ajenos a esta culpabilidad los medios de comunicación que se han hecho cómplices de esta globalizada campaña de desinformación y fomento de la incultura. Pero la gran mayoría es simple víctima de la conspiración y de su propia incultura aritmética. Sin estos factores no sería explicable esa generalizada difusión del equívoco de una parte a otra del mundo que se rige por el calendario cristiano. Los estudiosos de cómo y por qué se extienden a veces fulgurantemente los bulos y cómo la masa puede verse arrastrada ecuménicamente a cosas absurdas podrían hacer un diagnóstico de la vulnerabilidad del hombre al engaño y a la confusión con este descomunal ejemplo.

Esta sociedad no tolera que se escriba vurro con uve, pero acepta que se titubee a la hora de hacer una suma simple. Porque si el siglo empieza un año u otro no es cuestión de debate erudito ni de complicadas razones de aguafiestas escrupulosos. Si el milenio empieza el 2000 o el 2001 es una simple cuestión de cultura general, de aritmética elemental, de saber que una decena empieza en uno y acaba en diez, una centena en cien y un milenio en mil. De contar con los dedos, vamos. A los chiquillos que en la ESO ponen en sus exámenes que el siglo XVIII empieza en 1700 en vez de 1701 les catean. Pero en fin, como a la hora de los balances lo que importa es que dos y dos den cinco cuando se trata de ingresos y tres cuando se trata de gastos, ¿qué puede hacer no ya la cultura elemental sino el simple sentido común contra la aplastante aritmética de una caja registradora sumando pingües ingresos?

Mario A. Sierra es Técnico Superior de Comunicación de la Universidad de Alicante

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Apuntes Universitarios, Única, pág. 4 - Entrevista
ANA PONT: DIRECTORA DE LA ESCUELA DE INFORMÁTICA

"El nivel de matemáticas es cada vez más bajo"

MARÍA FABRA Directora de la Escuela de Informática de la Universidad Politécnica desde 1998, Ana Pont ha visto en ese tiempo multiplicarse por cuatro el número de alumnos que hacen prácticas en empresas, ha puesto en funcionamiento un aula Linux de libre acceso y un laboratorio de creación digital como complemento a la titulación de Especialista Multimedia. Promotora de la propuesta de Enric Valor como doctor honoris causa por esta universidad, dirige el centro con más grupos en valenciano de la Politécnica. En la Escuela de Informática hay 2.300 alumnos, 400 de ellos en primer curso. El 20% son mujeres, la cifra más baja de presencia femenina en esta universidad. El pasado curso se licenciaron 200 estudiantes.
Pregunta. ¿Qué titulaciones ofrece la Escuela de Informática?
Respuesta. En la Escuela se ofrecen dos titulaciones. Una es Sistemas, que se ocupa de los componentes internos del ordenador y la comunicación con otros ordenadores, lo que se conoce como redes. La segunda está relacionada con la programación orientada al usuario, como el desarrollo de software, desarrollo de aplicaciones, gestión de empresas. Ahora estamos impulsando la formación de técnicos multimedia, sobre la que hay una demanda de empresas que desarrollan productos multimedia, y del sector juguetero que demanda personas que sepan desarrollar programas de juegos, diseñar un quiosco virtual, puntos de información, o hacer CD-Rom.
P. ¿Enseñan a manejar programas?
R. No podemos quedarnos en la enseñanza del manejo de los programas que ya existen, enseñamos a construirlos. Es la manera de dar una formación que pueda evolucionar en el tiempo y adaptarse a las innovaciones tecnológicas.
P. ¿Qué importancia tienen las matemáticas para aprender informática?
R. Toda la informática tiene un fundamento matemático, el álgebra sobretodo.
P. ¿Cuál es el nivel de conocimiento matemático que traen los alumnos de primer curso?
R. Cada vez más bajo Los profesores están asustados por la preparación que traen. Dicen que ya no hablan el mismo lenguaje que los alumnos, existen problemas de comunicación por no conocer el lenguaje matemático. Muchos centros se están planteando hacer un curso previo en septiembre para tratar de igualar el nivel de matemáticas.
P. ¿Las matemáticas son un filtro?
R. Lo es en toda la Universidad Politécnica. Para Informática las matemáticas son conocimientos básicos, al igual que la física. Las matemáticas no sólo proporcionan una base sino que aportan capacidad de razonamiento, fundamental en los estudios técnicos.
P. ¿Las redes informáticas son el futuro?
R. Son el presente. Internet es el presente. En España vamos muy retrasados en comunicaciones. Para nosotros, la famosa autopista de la información es un camino de cabras. No estamos recibiendo, por parte de Telefónica, el soporte necesario para que Internet sea lo mismo que en Estados Unidos, no sólo un elemento de ocio sino también de negocio. No podemos perder tiempo esperando que lleguen los datos porque no existe una infraestructura correcta de Telefónica.
P. ¿Es caro el coste telefónico?
R. Es caro. Quienes están haciendo negocio en Internet son quienes están proporcionando la red, el soporte, y el servicio que están dando no es lo bastante bueno para permitir que las empresas hagan negocios correctamente. Los precios se pueden abaratar.
P. ¿Es tan bueno Microsoft como aparenta?
R. Desde el punto de vista de los profesionales de la informática, los productos de Microsoft son muy malos en la relación calidad-precio. La guerra por captar mercado es tal que esta firma lanza productos inacabados. Para un usuario sin demasiadas pretensiones están bien. Microsoft está lleno de agujeros y se quedan colgados los ordenadores con frecuencia. Entre los profesionales existe la tendencia de ir hacia otros productos más robustos y de libre acceso, como Linux, aunque no sean tan atractivos.

Ana Pont./ JOSÉ JORDÁN

 
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