18. (Junio 2015) La dactilonomía en el arte
Imprimir
Escrito por Ángel Requena Fraile   
Lunes 08 de Junio de 2015

La dactilonomía en el arte

La imagen que encabeza esta instantánea sobre la dactilonomía, el antiguo sistema de cómputo digital, procede del Palacio Trinci de Foligno; el fresco se atribuye a Gentile de Fabriano y fue pintado hacia 1412. La alegoría de la Aritmética desde su trono enseña a un joven el arte de contar con los dedos de las manos. Con la derecha marcan mil y con la izquierda cuarenta.

El triunfo del sistema de numeración de base diez se debe a la posibilidad de utilizar los dedos para contar y operar. Desde oriente a occidente se recogen numerosos testimonios escritos y gráficos sobre la práctica de contar con las manos.

El cómputo digital romano fue bastante sofisticado y todavía estuvo muy presente tanto en el medievo como en los inicios del Renacimiento, tal como vemos en las imágenes alegóricas de la Aritmética y las obras publicadas.

Los romanos hacían amplio uso para contar de los dedos de las manos. Hay numerosos restos arqueológicos de téseras, pequeñas fichas de hueso que eran usadas a modo de recibo. Fichas que por un lado llevaban la cifra romana y por el otro la figura digital. De igual forma existen abundantes citas literarias latinas como las de Plauto, Juvenal, Cicerón, Ovidio,  Apuleyo, o Qintiliano.

En fuentes cristianas la descripción más antigua conocida del sistema de cómputo digital procede del Liber de computo de San Cirilo de Alejandría (c. 376-444). San Isidoro de Sevilla lo reproducirá en sus Etimologías. Ahora bien, la obra más influyente y que no dejó de reproducirse durante la Edad Media fue De ratione temporum del monje Beda el Venerable (672 – 735), cuyo primer capítulo, Sobre la cuenta o lenguaje de dedos, daba un sistema completa hasta el millón.

El sistema del monje irlandés hacía uso de la mano izquierda para los números del 1 al 90 y de la derecha (sus simétricos) para los que van del 100 al 9000, tal como vemos reproducida en la Summa de Aritmética (1494) de Fra Luca Pacioli de la ilustración inferior sin color. La otra imagen colorista procede de un manuscrito miniado de Rabano Mauro (siglo IX)

En obras tan tardías como el Theatrum Arithmetico Geometricum (Liepzig, 1724) de Jacob Leupold (1674-1727) todavía se ilustra el sistema de Beda el Venerable.

La dactilonomía en el arte

La dactilonomía en el arte

El arte alto medieval y renacentista italiano tiende a representar la alegoría de la Aritmética haciendo uso del cálculo digital coexistiendo con el ábaco y el algoritmo indo-arábigo.

Las más numerosas muestras de alegorías de la Aritmética usando exclusivamente el cómputo digital nos las ofrecen los bajorrelieves de la Familia Pisano en Florencia, Pisa, Siena o Perugia. Reproducimos como muestra el panel de la Fontana Maggiore de Perugia de iconografía similar a la de Foligno: la dama enseña al joven el arte de contar.

La dactilonomía en el arte

Durante largo tiempo se usa una representación híbrida: con una mano se opera con los dedos y con la otra se sujeta una tablilla de números arábigos. Son muchas las imágenes de este tipo por lo que reproducimos solo algunas de las significativas.

Empezamos con un detalle de las Siete Artes Liberales de Giovanni di Ser Giovanni «Lo Scheggia» que se encuentra en el Museo de Arte de Catalunya. Debajo de la Aritmética se encuentra Pitágoras.

La dactilonomía en el arte

De las mismas características es la representación de Andrea di Bonaiuto en la Capilla de los Españoles de Santa María Novella en Florencia, obra acabada en 1365. La obra ensalza la orden de los Dominicos, situando a Santo Tomás de Aquino en la cima de la sabiduría y la teología.

La dactilonomía en el arte

Una forma muy bella y menos estática que utiliza el mismo motivo mixto de cálculo digital y algorítmico es el fresco de Sandro Botticelli para la Villa Lemmi de Florencia, que hoy se exhibe en el Museo del Louvre.

La Aritmética es la que se encuentra inmediatamente a la derecha de la más elevada (Filosofía). Su mano derecha calcula mientras la tablilla descansa a su izquierda.

La dactilonomía en el arte

La tablilla y el gesto de operar con los dedos se encuentran también en un sitio emblemático, el templete enrejado de la Plaza del Palio en Siena.

La dactilonomía en el arte

Un siglo más tarde, ya en la época manierista,  Pellegrino Tibaldí decora la parte central de la Biblioteca del Monasterio Palacio de San Lorenzo de El Escorial con una majestuosa Aritmética híbrida.

La dactilonomía en el arte

 
Volver