76. (Julio 2013) Anillo de Moebius, de Julio Cortázar
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Escrito por Marta Macho Stadler (Universidad del País Vasco)   
Martes 16 de Julio de 2013

Queremos tanto a Glenda (1980) es un libro de cuentos de Julio Cortázar  compuesto por diez historias. Esta breve reseña trata sobre el último de ellos, Anillo de Moebiusi.

Anillo de Moebius es la historia de una salvaje violación que termina con la muerte de Janet. Su asesino, Robert, es condenado a muerte. Mientras espera que se cumpla el castigo, Janet se acerca a él de diferentes maneras:

Poco a poco (¿poco a poco en una condición fuera del tiempo? Maneras de decir) se iban dando otros estados que acaso ya se habían dado, aunque ya significara antes y no había antes; ahora (y tampoco ahora) imperaba un estado viento y ahora un estado reptante en el que cada ahora era penoso, la oposición total al estado viento porque sólo se daba como arrastre, un progresar hacia ninguna parte; de haber podido pensar, en Janet se hubiera abierto paso la imagen de la oruga recorriendo una hoja suspendida en el aire, pasando por sus caras y volviendo a pasar sin la menor visión ni tacto ni límite, anillo de Moebius infinito, reptación hasta el borde de una cara para ingresar o ya estar en la opuesta y volver sin cesación de cara a cara, un arrastre lentísimo y penoso ahí donde no había medida de la lentitud o del sufrimiento pero se era reptación y ser reptación era lentitud y sufrimiento. O lo otro (¿lo otro en una condición sin términos comparables?), ser fiebre, recorrer vertiginosamente algo como tubos o sistemas o circuitos, recorrer condiciones que podían ser conjuntos matemáticos o partituras musicales, saltar de punto en punto o de nota en nota, entrar y salir de circuitos de computadora, ser conjunto o partitura o circuito recorriéndose a sí mismo y eso daba ser fiebre, daba recorrer furiosamente constelaciones instantáneas de signos o notas sin formas ni sonidos. De alguna manera era el sufrimiento, la fiebre. Ser ahora el estado cubo o ser ola contenía una diferencia, se era sin fiebre o sin reptación, el estado cubo no era la fiebre y ser fiebre no era el estado cubo o el estado ola. En el estado cubo ahora —un ahora de pronto más ahora— por primera vez (un ahora donde acababa de darse un indicio de primera vez), Janet dejó de ser el estado cubo para ser en el estado cubo, y más tarde (porque esa primera diferenciación del ahora entrañaba el sentimiento de más tarde) en el estado ola Janet dejó de ser el estado ola para ser en el estado ola. Y todo eso contenía los indicios de una temporalidad, ahora se podía reconocer una primera vez y una segunda vez, un ser en ola o ser en fiebre que se sucedían para ser perseguidos por un ser en viento o ser en follaje o ser de nuevo en cubo, ser cada vez más Janet en, ser Janet en el tiempo, ser eso que no era Janet pero que pasaba del estado cubo al estado fiebre o volvía al estado oruga, porque cada vez más los estados se fijaban y establecían y de algún modo se delimitaban no solamente en tiempo sino en espacio, se pasaba de uno a otro, se pasaba de una placidez cubo a una fiebre circuito matemático o follaje de selva ecuatorial o interminables botellas cristalinas o torbellinos de maelstromii en suspensión hialina o reptación penosa sobre superficies de doble cara o poliedros facetados.

La banda de Moebius simboliza aquí la idea de continuidad entre los opuestos –la agredida y su agresor–, diferentes estudios –que aparecen reseñados debajo– interpretan el mensaje de esta obra.iii

Muchas autoras y autores tildan Anillo de Moebius como una apología de la violación, reprochando además la representación de las mujeres en la obra de Cortázariv:

Frente a una narración bien construida y hermosamente escrita, como lo es “Anillo de Moebius”, la mujer crítica siente la necesidad de deslindar el valor literario del texto del mensaje que éste comunica. Al señalar, con intención analítica, la visión de la sexualidad y de la mujer en la obra de Cortázar, la crítica feminista no se propone hacer una evaluación literaria de su obra.

Robert, finalmente, se suicida en su celda.

Julio Cortázar

Julio Cortázar

Notas:

i Julio Cortázar, Anillo de Moebius en Queremos tanto a Glenda.

ii Voz holandesa: Remolino muy peligroso que se forma en las costas del mar del Norte.

iii Ver [Ilinca Ilian Taranu, La dualidad fantástica: el anillo de Moebius de Julio Cortázar, http://lejana.elte.hu/PDF_4/Ilinca_Ilian_Taranu.pdf]

iv Fragmento de [Malva E. Filer, Leer a Cortázar como mujer, en Me gustas cuando callas… Los escritores del “Boom” y el género sexual, Ed. Universidad de Puerto Rico, 67-90, 2002].

 
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